Recreación durante el embarazo

LIBROS RECOMENDADOS


Los libros son muy importantes en esta etapa  en el que se está embarazada, existen los que  los que resuelven dudas, los que estimulan la imaginación y los que informan ante la llegada de un nuevo ser.
Entre la gama de libros:



Parto Seguro: Una guía completa


La revolución del nacimiento: partos respetados, nacimientos seguros.

Un regalo para toda la vida

Qué se puede esperar cuando se está esperando

Nueve meses de espera: la guía definitiva del embarazo
Recetas para disfrutar del embarazo

Dietas para embarazadas


Nacimientos. Memorias de una comadrona
Mamá a los 40


Vínculos
El embarazo después de los 35
El vínculo afectivo con el niño que va a nacer. Un programa de nueve meses para tranquilizar, estimular y comunicar.
El arte del parto

El embarazo musical
Disfruta de tu embarazo en el agua


Mi embarazo día a día





 ACTIVIDADES AL AIRE LIBRE

Las actividades al aire libre se podrán realizar previa autorización de su doctor. Son recomendadas ya que mejora el sistema circulatorio, libera el stress, ayuda a controlar el peso, mantiene las articulaciones flexibles y favorece a la pronta recuperación post parto. No conviene practicar actividades agresivas tales como equitación,  ski acuático, buceo y montar bicicleta (principalmente en los primeros meses) ; en cambio, las mejores actividades la caminata a ritmo sostenido y natación.

CAMINATA
Es la actividad más segura, fácil de practicar y  que brinda beneficios cardiovasculares. Perfecta para las mujeres que no están acostumbradas a ejercitarse. Es recomendable practicar además ejercicios de respiración.

NATACIÓN
Trabaja todo el cuerpo pero pone poca presión sobre las articulaciones. La gran ventaja es que te siente ligera y flotas, lo cual alivia la incomodidad provocada por una barriga grande. Estimula el sistema cardiorespiratorio y previene las várices.

YOGA
Alivia la tensión y permite mantener al cuerpo flexible y dinámico






Bailar estando embarazada, ¿es posible?

Asistir a un concierto y no dejar de moverte, ir a una discoteca y dar rienda suelta a tus pies o practicar ejercicios de baile al son de tu música favorita en un gimnasio es un placer a cualquier edad. Pero, ¿podemos bailar estando embarazadas? ¿Es bueno para el bebé que su mamá se mueva y agite su cuerpo al son de la música? ¿En qué situaciones no es recomendable el baile durante el embarazo?

Está claro que el embarazo no es una enfermedad y, por tanto, debemos cuidarnos, pero no limitarnos. Sin embargo, en la suavidad de los ejercicios reside el equilibrio para que el baile sea también un beneficio para la mamá y su bebé. Dar botes y saltar al ritmo de los Black Eyes Peas no es lo más beneficioso para la gestación, ya que durante los tres primeros meses existe el riesgo de desprendimiento de la placenta y, durante el último trimestre, el volumen del útero es demasiado grande como para ponerse a saltar.
En cambio, practicar 30 minutos de ejercicio aeróbico diario es una de las recomendaciones en las que más insisten los ginecólogos, sobre todo, cuando se trata de caminar o de nadar, dos ejercicios idóneos para practicar durante el embarazo. Los beneficios adicionales del ejercicio durante el embarazo son múltiples: ayuda a aliviar el estrés, a desarrollar la resistencia necesaria frente al parto, reduce el riesgo de diabetes, mejora el trabajo cardiovascular y favorece el buen humor.

El mejor baile para practicar durante el embarazo es la danza árabe por ser de bajo impacto y estar compuesta por pasos suaves. En cualquier tipo de baile que practiques durante el embarazo debes tener mucha precaución con los giros, los saltos y, en general, con los movimientos bruscos. Comienza a bailar suavemente, no subas mucho tu temperatura corporal y vigila tu postura para no lesionar tu espalda con el peso del bebé. Excluye cualquier movimiento que pueda hacerte perder el equilibrio porque las caídas son especialmente peligrosas durante la gestación y con el aumento de peso de tu cuerpo, el centro de gravedad no es el mismo. Y además, incluye siempre un calentamiento muscular inicial antes de la sesión de baile y bebe mucho líquido antes, durante y después del baile.

El baile te hará transpirar, por lo que es necesario que tomes agua para reponer el líquido perdido. No obstante, recuerda que debes dejar de hacer cualquier actividad física, incluido el baile, y consultar inmediatamente con tu médico si notas la pérdida de algún fluido, empiezas a sangrar, te sientes mareada, con náuseas o te falta el aliento, sientes dolor en el abdomen o en el pecho, tienes contracciones o no sientes a tu bebé moverse.

FUENTE: http://www.guiainfantil.com/blog/1280/bailar-estando-embarazada-es-posible.html